Rafael Peña
Ceuta, 16 abr (EFE).- La fotógrafa Lucrecia Díaz, nacida en Estados Unidos, criada en Colombia y que actualmente reside en España, ha reconocido que hoy en día ha «decaído mucho» el «valor profesional» de una fotografía debido a la aparición de móviles de última generación, y ha advertido de que la situación se «complicará aún más» con la inteligencia artificial.
Lucrecia Díaz Faciolince, nacida en Búfalo, la segunda ciudad más grande del estado de Nueva York, aunque pasó su niñez en Colombia, ha reflexionado en una entrevista con EFE sobre el trabajo profesional de un fotógrafo: «No está todavía bien valorado y, por ello, invito a la ciudadanía a consumir arte porque es lo que le da sentido a un país, es decir, la creatividad de cada región es muy importante y España tiene mucho que enseñar porque visualmente es muy atractiva».
La fotógrafa ha resaltado que la irrupción de la inteligencia artificial «cambiará por completo el panorama, lo cual abrirá un nuevo debate dentro del arte y, como artistas, «quizás tengamos que recurrir a realizar fotos analógicas para que nadie las pueda manipular».
Lo ideal sería que esta labor «se pagara mejor y, sobre todo, para reconocer la valía porque en Estados Unidos, hace quince años, ya te contrataban para hacer sesiones para Facebook y ahora están comenzando a contratar fotógrafos para determinadas redes, por lo que invito a todos a hacerse un buen retrato o una buena foto de familia».
Díaz ha centrado su larga trayectoria profesional en el retrato y fotos artísticas de danza o baile. «Además de mis dos grandes temas, me gusta mostrar de cerca a las personas, más allá de sus oficios», comenta a EFE.
Se inició en la profesión tras fotografiar a los bomberos y policías de su barrio, lo que dio como resultado «Sirviendo a la comunidad», exposición que acogió la Biblioteca Pública de Miami.
«El arte nace con uno, yo estudié Relaciones Internacionales pero las fotos siempre han sido mi hobby, de ahí que una vez que empecé a viajar se convirtió en mi profesión después de estudiar en Chile un diplomado de fotografía, lo que hizo que en cada viaje buscara un tema distinto», explica.
Entiende que es «difícil» vivir de la fotografía porque a la gente le cuesta «pagar por una buena foto». Y concreta: «hoy en día, con las redes sociales, la gente piensa que tiene que verse mejor, es decir, todo el mundo se tiene que vender en los perfiles sociales y contar con un buen fotógrafo es muy importante».
No obstante, apunta que la aparición de las redes sociales «hace que todo el mundo esté en la calle haciéndose selfies o fotos con los móviles y, de hecho, los teléfonos tienen unas capacidades maravillosas que pueden hacer mejores fotos en la oscuridad que con una cámara profesional».
Lucrecia Díaz, que desde el año 1996 reside en España y que tiene un estudio en Madrid, se encuentra estos días en Ceuta con motivo de su exposición «Detrás del uniforme», que permanecerá abierta hasta finales de este mes y en la que se aproxima a los hombres y mujeres que sirven en las Fuerzas Armadas desde la «intimidad y la cercanía física».
La fotógrafa, que ha residido en lugares tan diversos como Estados Unidos, Alemania, Chile y Australia, subraya que su idea es «aproximarme a la persona, sacarla de su entorno, meterla en un estudio y descubrir al que está detrás del uniforme, que es alguien como tú o yo».
Con esta muestra militar, la autora quiere celebrar la «heterogeneidad y darles protagonismo a todos aquellos cuya profesión y finalidad son el servicio y el trabajo por los demás».
El proyecto nació tras visitar Ceuta el pasado mes de septiembre con motivo del aniversario de la fundación de La Legión.
«La Comandancia General de Ceuta me dijo que sí a mi proyecto y ésto pone de relieve que siempre habrá alguien, por difícil que sea, que acepte tu reto, de ahí que siempre hay que estar en esta búsqueda de retos o proyectos, sin dar miedo el no», insiste.
Lucrecia Díaz piensa seguir vinculada a España: «Tengo un estudio en Madrid y será mi sitio aunque siempre necesito moverme porque como artista iré a hacer fotografías cuando salga una oportunidad para un buen trabajo». EFE
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