El Gobierno de Estados Unidos ha considerado este lunes que la destitución del ministro de Defensa de Rusia, Sergei Shoigu, que llevaba desde 2012 en el cargo, es «una indicación más de la desesperación» del presidente ruso, Vladimir Putin, «por mantener su guerra de agresión a Ucrania.
El portavoz adjunto del Departamento de Estado, Vedant Patel, ha remarcado durante una rueda de prensa que este conflicto «representa una sangría importante para la economía rusa y grandes pérdidas de tropas, con estimaciones de hasta 315.000 bajas».
«La movilización del Kremlin en su guerra de agresión contra Ucrania ha causado sufrimiento a tantas familias en Rusia. Y Rusia inició esta guerra no provocada contra Ucrania. Putin podría ponerle fin en cualquier momento retirando sus fuerzas de Ucrania en lugar de seguir lanzando ataques brutales contra el pueblo ucraniano todos los días», ha declarado.
En la víspera, Putin destituyó a Shoigu y nombró a Andréi Belousov –hasta ahora viceprimer ministro del Gobierno y de marcado perfil económico– para el puesto, en el marco del inicio del que ya es su quinto mandato en el Kremlin.