El presidente de Zimbabue, Emmerson Mnangagwa, ha anunciado este miércoles que ha declarado el estado de desastre nacional para hacer frente a la prolongada crisis de sequía que afecta al país africano, especialmente tras la falta de lluvia provocada por el fenómeno ‘El Niño’.
«He declarado el estado de desastre por sequía debido a la grave situación alimentaria provocada por el efecto ‘El Niño’. Estamos movilizando recursos para ayudar a las comunidades afectadas y mitigar el impacto de este desastre natural. Nos mantenemos unidos en solidaridad durante estos tiempos difíciles», ha informado a través de su perfil en la red social X.
El mandatario ha realizado un discurso a la nación sobre la situación de seguridad alimentaria en el país y ha afirmado que «nadie morirá de hambre mientras pone en marcha varias medidas estratégicas para superar la crisis creada por la sequía». «Queridos zimbabuenses, la situación de sequía inducida por el cambio climático requiere medidas según lo previsto en nuestras leyes», ha comunicado.
Durante su intervención, ha señalado que el país tiene un déficit de grano de 680.000 toneladas y que 2,7 millones de personas necesitan ayuda alimentaria. La siembra de cereales básicos se retrasó debido a las altas temperaturas, mientras que la reducción de precipitaciones y las rachas secas afectaron gravemente a la producción.
El déficit se cubrirá con importaciones, ha anunciado el mandatario, que ha señalado que ya se han adoptado medidas para fomentar la participación del sector privado con la principal prioridad de garantizar alimentos a toda la población, según ha informado el portal de noticias New Zimbabwe.
Mnangagwa, que ha rogado a la comunidad internacional, la ONU y las agencias humanitarias que intervengan, ha indicado que prestará atención a la energía solar para mantener a flote las empresas, debido a que la actual sequía ha provocado una reducción de la generación de energía del país, que depende de la hidroelectricidad.