A lo largo de toda la península se pueden encontrar pueblos que son toda una maravilla. Estos no dejan nunca de sorprender al viajero, pues cada uno de ellos tienen algo único que les hacen diferentes. Así, gracias sus hermosas calles, hermosos monumentos y secretos escondidos, estas localidades se convierten en destinos imprescindibles donde poder conocer la historia, el arte y la cultura de la región. Pues, en su mayoría, presentan un conjunto patrimonial que combina a la perfección con su entorno natural, dando lugar a un cóctel que invita a perderse por ellas y disfrutar de todos sus encantos.
En este sentido, encaramado en una colina a orillas del embalse de Linares, en Segovia, se alza el pueblo de Maderuelo, una villa medieval que es conocida no solo por su belleza paisajística sino también por su relevancia histórica y cultural. Pasar por su casco antiguo, declarado Conjunto Histórico, permite descubrir un gran conjunto monumental, el cual ha sabido conservarse a lo largo de los siglos, permitiendo a sus visitantes dar un paseo por la historia mientras recorren sus empedradas calles.
Una gran muralla
Maderuelo, en Segovia (Shutterstock).
El origen de Maderuelo es algo incierto, aunque sí se tiene constancia de que formó parte durante la Reconquista “de la primera línea provincial de núcleos defensivos de la margen izquierda del Duero”, tal y como explican desde el portal web de turismo de Segovia. Así, algunos investigadores sitúan su fundación en el siglo X y ya en el siglo XII contaba con diez parroquias y se convirtió en cabeza de Comunidad de Villa y Tierra de la Comunidad de Villa y Tierra de Maderuelo.
Gracias a ello y su gran importancia en la comarca, la villa se encontraba rodeada de una impresionante muralla. A día de hoy, se conserva gran parte de este recinto fortificado, siendo uno de los principales monumentos de la localidad. Así, de todas las puertas que albergaba, el Arco de la Villa es la más destacada, pues todavía conserva “los cerrojos, la poterna y unas gruesas puertas de madera acorazada, con adornos y policromía, un blindaje del siglo XV. Asimismo, hasta principios del siglo XX disponía de foso y puente”, señalan desde la web.
Igualmente, en el extremo oriental de la muralla se situaba el castillo, del cual queda tan solo el torreón. Esta construcción protegía el acceso norte y fue levantado por los condes de San Esteban y a día de hoy se pueden contemplar sus ruinas, pues numerosos rayos derribaron parte de sus muros. No obstante, todavía se puede apreciar su planta cuadrada y el aljibe que se ubica en el subsuelo.
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Un paseo por Maderuelo
Maderuelo, en Segovia (Turismo Segovia). (JAVIER_SANCHEZ/)
No es de extrañar que Maduerelo forme parte de la lista de Los Pueblos más Bonitos de España. Un paseo por sus empedradas calles permite descubrir una arquitectura maravillosa que refleja los trazados propios de la región, así como un conjunto monumental que deja sin aliento. De todos sus atractivos, la iglesia de Santa María del Castillo domina la localidad desde su posición, pues se enclava en el punto más alto del caserío. Construida en el siglo XII, presenta un estilo mudéjar, aunque conserva trazados de diferentes estilos, siendo, además, el único templo segoviano con restos de estilo califal.
En su interior alberga una serie de frescos de gran valor artístico y religioso, descubiertos durante unas obras de restauración en el siglo XX. Igualmente, la Puerta del Barrio y Casa Torre del Hospital es otro de los elementos imperdibles en la localidad. Forman parte del antiguo conjunto defensivo y se encargaba de proteger el único acceso desde la muralla de la umbría. A la entrada se le añadió una casa que hizo las veces de torreón, para posteriormente servir como hospital o albergue de peregrinos y gentes necesitadas. Además, se denomina Puerta del Barrio por ubicarse aquí la Judería o Barrio Judío de Maderuelo.
Por su parte, cabe destacar también la iglesia-palacio de San Miguel, una construcción formada por una antigua parroquia del siglo XII y una vivienda adosada que es privada. Los muros de la construcción originalmente formaron parte del conjunto defensivo en la zona oeste. A lo largo de los siglos, ha experimentado profundas remodelaciones. En el siglo XV, se añadió una segunda nave rectangular rematada con una pequeña espadaña. El campanario-torreón de la primitiva ermita románica, que contaba con un ábside semicircular, fue transformado en una vivienda.
Ya en las afueras del pueblo, otra parada que uno no se puede perder es la ermita de la Veracruz, una construcción templaria que destaca por albergar en su interior uno de los conjuntos de frescos románicos más importantes de nuestro país. Sin embargo, la construcción del embalse en 1950 provocó el traslado de todas estas obras al Museo del Prado. Por otro lado, la ermita de Castroboda fue construida en el siglo XVIII por los vecinos del pueblo para rendir culto a la patrona de Maderuelo.
Naturaleza y rutas de senderismo
Parque Natural de las Hoces del río Riaza, en Segovia (Shutterstock).
Más allá de su patrimonio artístico e histórico, Maderuelo destaca también por ser un destino perfecto para los amantes de la naturaleza. Así, el embalse de Linares del Arroyo, construido a mediados del siglo XX, rodea el núcleo histórico y ofrece una estampa de postal. Aunque la creación del embalse anegó parte de las tierras fértiles del valle del Riaza, ahora es un punto destacado para la práctica de deportes acuáticos y la pesca, así como un lugar ideal para el avistamiento de aves.
Pero esto no es todo, pues en las inmediaciones del pueblo se encuentra el Parque Natural de las Hoces del Río Riaza. Este enclave natural, protegido desde 1982, alberga una de las colonias de buitres leonados más importantes de España. Las profundas gargantas talladas por el río ofrecen un escenario perfecto para el senderismo, la observación de fauna y la conexión con la naturaleza.
Cómo llegar
Desde Segovia, el viaje es de alrededor de 1 hora y 15 minutos por la carretera N-110. Por su parte, desde Soria el trayecto tiene una duración estimada de 1 hora y 20 minutos por la A-11, la Carretera Soria – Plasencia y la N-110.