Sídney (Australia), 28 may (EFE).- Unicef alertó este martes de que más del 40 % de los afectados por la avalancha ocurrida el pasado viernes en el norte de Papúa Nueva Guinea, que según las autoridades de ese país habría enterrado a más de 2.000 personas, son menores de 16 años.
«Ahora está claro que más del 40% de los afectados son menores de 16 años que han quedado profundamente traumatizados por la pérdida de sus familias, hogares y medios de subsistencia», dijo hoy en un comunicado la representante de Unicef en Papúa Nueva Guinea, Angela Kearney.
Este porcentaje, calculado tras una «rápida evaluación», se establece sobre el total aproximado de 4.000 afectados por el alud, incluyendo aquellos que han perdido sus hogares o fuentes de ingresos, según las estimaciones del Ministerio de Defensa papú y Unicef.
Según una carta del Centro Nacional de Desastres del país enviada el lunes al coordinador de la ONU en Papúa Nueva Guinea, a la que tuvo acceso EFE, «más de 2.000 personas quedaron enterradas vivas» por la «masiva avalancha».
No obstante, fuentes de la ONU llaman a la prudencia en cuanto a las cifras, y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), que tiene a seis trabajadores en la zona de la catástrofe, estimaba el domingo en unos 670 los posibles fallecidos por ser directamente impactados por la avalancha, si bien siguen trabajando para actualizar y cotejar los datos.
Las tareas de búsqueda de víctimas son muy complejas debido en parte a la inestabilidad del terreno, pues entre otros factores la avalancha cayó sobre una zona con canales de agua que mantienen el área húmeda y hacen que el alud siga deslizándose, dijeron hoy a EFE fuentes de la ONU.
Las labores, lideradas por las Fuerzas de Defensas de Papúa Nueva Guinea, se realizan «en condiciones extremadamente difíciles, ya que el terreno sigue siendo inestable y las carreteras dañadas restringen el acceso a la zona de la catástrofe», precisó Unicef en su comunicado.
El derrumbe de parte de una montaña la madrugada del viernes (17.00 GMT del jueves) por causas aún desconocidas impactó cerca de la mina de oro de Porgera, en la provincia de Enga, y sobre un poblado de la zona, a unos 600 kilómeros de Port Moresby. EFE
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