El comandante de las Fuerzas Armadas estadounidenses Harrison Mann ha anunciado su renuncia como militar por motivos de conciencia y en protesta por el apoyo del Gobierno estadounidense a la ofensiva de Israel sobre la Franja de Gaza.
Mann, destinado en la Agencia de Inteligencia de Defensa, ha anunciado su decisión en un mensaje publicado en la red social LinkedIn en el que explica que Estados Unidos ha «facilitado y aportado medios» para la muerte de civiles palestinos.
«Desde hace meses llevo pensando en la política de apoyo casi incondicional al Gobierno de Israel, al que se ha facilitado y aportado medios para matar y matar de hambre a decenas de miles de palestinos inocentes», explica, según recoge el diario ‘The New York Times’.
La biografía de Mann en LinkedIn indica que está especializado en Oriente Próximo y África y que lleva trece años de carrera. Anteriormente trabajó en la Embajada estadounidense en Túnez.
«Este apoyo incondicional fomenta una escalada imprudente que podría provocar una guerra más amplia», ha añadido antes de indicar que quería dejar las Fuerzas Armadas, pero que la ofensiva israelí sobre Gaza le animó a concretar la decisión el 1 de noviembre pasado.
En la misiva se refiere a las «imágenes horribles y descorazonadoras» que han llegado del conflicto. «No he sido capaz de ignorar la relación entre esas imágenes y mi labor. Esto me ha causado una vergüenza y una sensación de culpa increíbles», ha subrayado.
«Quiero aclarar que como descendiente de judíos europeos he recibido una educación de moral implacable en lo que se refiere a la responsabilidad por una limpieza étnica», ha añadido. El propio Mann explica en el texto que ya trasladó su opinión a sus compañeros el 16 de abril.
Mann ha confirmado en conversación telefónica con ‘The New York Times’ que es el autor de este texto, pero no ha querido hacer declaraciones por la normativa interna militar.
Este es el primer caso público de un militar que renuncia en protesta por el apoyo estadounidense a Israel. En cualquier caso este tipo de dimisiones son muy poco frecuentes y más aún que se haga público el caso y sus motivaciones.