El Ministerio de Defensa de Taiwán ha anunciado este viernes de madrugada la detección de casi medio centenar de cazas y cerca de una treintena de buques de guerra chinos en los alrededores de la isla en el marco del segundo y último día de las maniobras militares del Ejército de China iniciadas en respuesta a unas declaraciones del recién elegido presidente taiwanés, William Lei, quien instó a Pekín a «afrontar la existencia» del territorio como una entidad completamente independiente.
«49 aviones del Ejército Popular de Liberación (EPL), 19 buques del EPL y 7 barcos de la Guardia Costera de China han sido detectados operando alrededor de Taiwán hacia las 6.00 horas (hora local). 35 de los cazas han cruzado la zona de identificación de defensa aérea de Taiwán», ha anunciado la cartera ministerial en su cuenta de la red social X.
El Mando de Operaciones del Este del EPL ha informado sobre el inicio del segundo día de operaciones aéreas, marítimas y terrestres en los alrededores de la isla, que estarán enfocados en «en patrullas conjuntas de preparación para el combate marítimo y aéreo, toma conjunta del control integral del campo de batalla, el ataque conjunto de precisión contra objetivos clave y otras cuestiones».
Además, las fuerzas chinas llevarán a cabo un entrenamiento en asalto marítimo, en ataque terrestre, en defensa aérea y antisubmarina «poniendo a prueba aún más sus capacidades reales de combate».
Desde Pekín, las autoridades chinas han reiterado en numerosas ocasiones que la independencia de Taiwán no será tolerada y que no descartarán el uso de la fuerza para impedir la secesión. Los vínculos entre China y la isla de Taiwán, a la que considera una provincia más bajo su soberanía, se rompieron en 1949, después de que las fuerzas del partido nacionalista Kuomintang sufrieran una derrota en la guerra civil contra el Partido Comunista y se trasladaran al archipiélago. Las relaciones se restablecieron solo a nivel empresarial e informal a finales de la década de los 80.