La Fiscalía en sus investigaciones encontró que Brayan Ramírez presuntamente abusó y compartió contenido sexual de otra menor. (Crédito: Policía Nacional)
El crimen de la bebé de 3 años, Celeste, que llegó sin vida y con signos de posible violencia sexual al Hospital de Kennedy, el pasado viernes 31 de mayo, sigue consternando a la capital colombiana, ya que cada día se conocen más pormenores del despreciable hecho, donde se señala como responsable al padrastro de la menor, Brayan Ramírez, quien fue cobijado con medida de aseguramiento en establecimiento carcelario durante el fin de semana.
De acuerdo con el testimonio de una familiar de la progenitora de la pequeña, el hombre la tenía amedrentada y era constante el maltrato al que la sometía a ella y a sus dos hijas menores de edad, e incluso las llegó a amenazar de muerte.
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“El terminó haciendo lo que siempre le dijo, que la iba a matar a ella o a sus hijas. Acabó con un angelito que no tenía nada que ver. Yo quiero pedir justicia para mi sobrina. Que esto no quede impune, que esto no quede como otros homicidios y que no quede solo en un papel”, indicó una de las tías de Celeste en una entrevista con el informativo de televisión Noticias Caracol.
La familiar de la progenitora de la bebé víctima también señaló que en varias oportunidades le advirtió que se separara del hombre ante su conducta violenta que podría concluir con un trágico hecho, como el que efectivamente ocurrió.
Aunque Ramírez está encarcelado, fue procesado por los delitos de pornografía con personas menores de 18 años y actos sexuales con menor de 14 años, ya que en el momento de su captura le hallaron en su celular contenido explícito con la explotación sexual de otra menor de entre 3 y 4 años de edad, pero se espera que en esta semana que inicia lo vinculen formalmente con el crimen de Celeste.
“Al momento de realizar el registro y posterior solicitud del celular para verificar el email, el ciudadano, en este caso el padrastro, presenta su celular sin percatarse que tenía un video, al parecer, de contenido sexual con una menor de edad”, informó durante la detención el coronel Norberto Hernán Caro, jefe Seccional de Protección y Servicios Especiales de la Policía Metropolitana de Bogotá.
No obstante, la familia del señalado asesino entregó otra versión de lo ocurrido en la que sostuvieron que fue la madre de la bebé la que los llamó de urgencia, luego de que encontrara inconsciente a la niña.
“Entran y ella la estaba soplando y le dice a mi mamá que le pegó una bofetada en la boca, pero que no le hizo nada más. Mi madre ve a la niña morada y la saca a pedir auxilio en la calle. Llegó yo al domicilio y me encuentro con la niña ya desgonzada totalmente. La cojo yo a mi poder y empiezo a pedir auxilio, cuando pasó un carro particular que me brindo la ayuda”, afirmó en Citynoticias, Lizeth Castro, tía de Ramírez.
La madre del procesado, Diana Franco, defendió a su hijo y aseguró que cuando encontraron desmayada a la bebé, él no estaba en el lugar de los hechos.
“Mi hijo se encontraba afuera en la sala, cuando ella. El empezó a gritar muy asustado: —¿Qué pasó?—. Luego entre los dos cogían a la niña y mi mamá se las quitó (…) Ella no quería llevar a la niña al hospital aún viéndola en una colchoneta muriéndose. ¡No quería!”, aseveró.
Sobre la posibles causas de la muerte de Celeste, la pariente del sospechoso indicó que posiblemente por los problemas de salud previos que tenía ella ante el supuesto abandono al que estaba sometida.
“Yo sé que fue por la enfermedad de la niña. Ella estaba muy enferma. Llevaba una semana atrás con vómito por boca y nariz. Le dije llevémosla al hospital. Y me decía que no que porque le quitaban a sus hijas”, señaló.
