Hace unos días, Pilar Rubio reaparecía ante las cámaras y zanjaba por completo los rumores que ha habido en los últimos meses de crisis matrimonial con Sergio Ramos. Dejando claro que «todo está bien» y que no tiene ningún problema en vivir en Sevilla, la presentadora acababa con las habladurías sobre su vida.
«Amo Andalucía, y bueno, pues eso es otra cosa más de las que dicen. ¿Qué hacemos? ¿Qué hacemos? Decidme vosotros, ¿qué tengo que hacer yo? Vosotros decís esas cosas y yo, ¿qué tengo que hacer? ¿Desmentir todo el rato? No. Es que no, no sé» confesaba Pilar.
«Tampoco puedo estar todo el rato entrando en ese bucle porque es absurdo. Nosotros a veces vemos cosas u oímos cosas y es como si fuera, pues no sé, como si yo estuviera viendo una telenovela. Es que no va con mi vida, porque mi vida es otra, totalmente distinta, con mis hijos y mi marido, y todo normal» comentaba la presentadora.
Tras estas declaraciones, Sergio se dejó ver por la Feria de Abril este sábado, en la plaza de toros de la Maestranza, pero evitó hacer cualquier tipo de comentario sobre las palabras de su mujer.
El jugador de fútbol se dio un baño de masas con sus seguidores, que le pedían autógrafos y fotografías al verle. Muy amablemente, Ramos atendió a la gran mayoría de personas que le llamaban la atención y disfrutó con un amigo de la tarde de toros.