El conferencista uruguayo también es cardiólogo EFE/ Sofía Torres
(Sofia Torres/)
Roberto Canessa ha dado charlas alrededor del mundo sobre su experiencia de supervivencia en el accidente que dejó varados en Los Andes a un grupo de jóvenes en 1972; sin embargo, cuando llegó el turno de dar una conferencia en Torreón, Coahuila, una persona aseguró que estaba acosando a sus admiradoras.
“Más que inspirada, salí decepcionada de este señor que al tomar la foto a todas las chavas les metía mano”, escribió la persona que grabó a Canessa durante un encuentro con fans en el Teatro Nazas.
En la grabación se pudo ver que una joven estaba acercándose a Roberto Canessa para agacharse y posar en la foto; no obstante, la mano del sobreviviente tocó los glúteos de la mujer y luego regresó a su cintura.
La historia de los sobrevivientes de los Andes volvió a adquirir popularidad con el estreno de La Sociedad de la nieve (2023), por lo que las acusaciones en contra de uno de ellos despertaron sorpresa y se pudieron leer todo tipo de comentarios como: “Se me cayó un ídolo”, “Me recordó a Vicente Fernández” y “Nunca lo creí de él”, aunque también hubo quienes aseguraron que quizá había sido un malentendido al acomodarse.
La persona que publicó la grabación aseguró que a todas las mujeres que subían para retratarse con él les había hecho lo mismo, pero hasta el momento no hay alguna denuncia pública contra el conferencista uruguayo.
Lo cierto es que la grabación generó indignación, por lo que la colectiva feminista Marea Verde México pidió que los organizadores del evento que aclaren la situación:
“Estamos esperando el posicionamiento y el comunicado de quien trajo a Torreón, Coahuila al asqueroso acosador de Roberto Canessa. ¿Quién va a dar la cara por haber traído a un acosador sexual de mujeres a La Laguna?”, se pudo leer en una publicación de dicha colectiva.
Las publicaciones más recientes de la cuenta de Roberto Canessa en X (antes Twitter) son de entre 2017 y 2018, así que es poco probable que se posicione por esta vía ante las acusaciones de acoso.
Mucha gente compartió con indignación la grabación de Canessa con la joven que se acercó a saludarlo, pero también hubo quienes contaron buenas experiencias en sus conferencias, las cuales se caracterizan por la reflexión, la posibilidad de obtener su autógrafo, la anécdota de cómo salieron de Los Andes y la inspiración que pueda despertar en algunas personas.
El mexicano que le devolvió sus pertenencias a Eduardo Strauch
En 2005, Ricardo Peña, un alpinista de México, realizó un descubrimiento remarcable en El Valle de las Lágrimas, Andes. Localizó una cartera, rollo de fotos, dólares, pesos uruguayos, y el pasaporte de Eduardo Strauch, pertenencias que habían sobrevivido inalteradas desde el trágico accidente de 1972. Optando por dejarlas en su sitio original, Peña contactó más adelante a Strauch, gesto que cimentó una sólida amistad entre ambos.
El montañista Ricardo Peña encontró en 2005 objetos de Eduardo Strauch , sobreviviente del accidente de los Andes en 1972
Foto:
IG/ricardo_pena_araujo
Este hallazgo no solo removió el pasado al punto de causar pesadillas en Strauch, quien a sus 57 años se había distinguido como arquitecto, sino que también recordó al público la inaudita historia de supervivencia de los 16 uruguayos tras el accidente aéreo. La reciente popularidad del tema, avivada por el estreno de La sociedad de la nieve en Netflix, realizada por Juan Antonio Bayona, refleja un renovado interés en esta narrativa de supervivencia y en las complejas decisiones tomadas por los sobrevivientes.
La relación entre Eduardo Strauch y Ricardo Peña se fortaleció con el tiempo, al punto de que Peña invitó a Strauch a su boda, un evento que simbolizó la profundidad de su lazo. Esta amistad trasciende una mera anécdota para convertirse en testimonio del respeto y la humanidad post tragedia. Además, cabe destacar que esta no es la única conexión entre México y la historia de los supervivientes uruguayos, pues la primera película sobre este evento, Los supervivientes de los Andes, fue realizada por el cineasta mexicano René Cardona en 1976.