El canciller alemán, Olaf Scholz, ha abogado este miércoles por implementar todas las medidas que sean necesarias para hacer frente a los casos de espionaje registrados en los últimos días en Alemania y en su mayoría vinculados a China, aunque ha incidido en que da actuará «vengan del país que venga».
«No podemos aceptar el espionaje en nuestra contra, venga del país que venga. Y por eso debe ser esclarecido, y los responsables deben ser detenidos y llevados ante la justicia», ha manifestado el mandatario alemán durante una rueda de prensa conjunta con el primer ministro británico, Rishi Sunak.
Tan solo en lo que va de semana las autoridades alemanas han confirmado la detención de tres presuntos miembros de una red de espionaje para China, así como la de un asesor de un eurodiputado de la ultraderecha Alternativa para Alemania (AfD), también por supuestamente espiar para China.
«La sospecha, dirigida contra empleados y candidatos de AfD, es muy preocupante», ha manifestado Scholz respecto a este último caso, que involucraría directamente al ayudante del eurodiputado Maximilian Krah, que habría facilitado a China información relativa a la Eurocámara y sobre disidentes chinos en Alemania.
«Es muy importante que tengamos buenos servicios de Inteligencia, buenos fiscales, un buen trabajo policial, que todos colaboren de forma estrecha, y que esto también ocurra a través de las fronteras», ha zanjado finalmente el canciller Scholz.