Múnich (Alemania), 12 jun (EFE).- En enero, Robert Andrich no era un fijo en las alineaciones de Xabi Alonso en el Bayer Leverkusen. Eclipsado por Granit Xhaka y Exequiel Palacios, una lesión muscular del jugador argentino abrió un hueco en el centro del campo a un hombre de 29 años que, desde entonces, ascendió como un cohete hasta llegar a la selección alemana, donde ahora es un hombre clave para el seleccionador Julian Nagelsmann.
Andrich es el jugador del que casi nadie habla. El regreso de Toni Kroos para terminar su espectacular carrera cuando finalice la Eurocopa acapara todos los titulares. Sin embargo, el centrocampista del Bayer Leverkusen se ha convertido en un jugador clave para dar el equilibrio que Alemania perdió hace tiempo con la ausencia de Sami Khedira, que disputó su último partido con el combinado germano en julio de 2016 (cuartos de final de la Eurocopa de Francia).
Desde la retirada de Khedira, Alemania ha desaparecido de las grandes eliminatorias de los torneos internacionales. No pasó de la fase de grupos en los Mundiales de Rusia 2018 y Catar 2022. Y, en la pasada Eurocopa, se atascó en los octavos de final. Y una de las claves de tanto fracaso fue la pérdida de la solidez defensiva de un equipo que por fin parece haber encontrado el equilibrio con la aparición de Andrich bajo el manto de Julian Nagelsmann.
El seleccionador alemán, con el regreso de Kroos, necesitaba a un jugador del perfil de Andrich: físico, con un trato correcto de la pelota y con una vocación innegociable de correr muchos kilómetros para hacer las coberturas. Y cuando Naggelsmann accedió al cargo para sustituir a Hansi Flick y al interino Rudi Völler, no dudó en citar para su primera convocatoria al jugador del Leverkusen, que aún en el mes de octubre de 2023 vivía eclipsado en su club por la dupla que formaban en el centro del campo Xhaka y Palacios.
Entonces, Kroos todavía no había anunciado su regreso a la selección. Sin embargo, Naggelsmann era consciente de que necesitaba a un jugador de las características de Andrich. En su primera convocatoria, para un par de amistosos ante Estados Unidos y México, comprobó en vivo y en directo, durante los entrenamientos de Alemania, que Andrich era su hombre.
Aún tardó en hacerle debutar. Antes probó con la dupla Gross-Gündogan en esa primera ventana de amistosos y con Gündogan-Kimmich y Gündogan-Goretzka en la segunda, en la que Alemania fue derrotado 2-3 por Turquía y 2-0 por Austria. Y, precisamente, ante Austria, debutó por fin Andrich, que apenas jugó media hora tras sustituir a Goretzka. Dio muy buenas sensaciones en apenas un rato y ya no se caería jamás del once. En los siguientes partidos, ya con Kroos sobre el césped, Alemania, por fin, encontró al dúo que necesitaba.
Las sensaciones cambiaron por completo cuando Kroos y Andrich se encontraron en el terreno de juego. Coincidieron juntos por primera vez en marzo para enfrentarse a Francia y a los Países Bajos, dos rivales de primer nivel. Alemania ganó los dos partidos, 0-2 a los primeros y 2-1 a los segundos, con una gran compenetración de ambos jugadores. Kroos aportó creación y Andrich dio solidez atrás. Y Naggelsmann acabó encantado.
«Con Andrich, buscaba un jugador con un perfil diferente. Es importante que no solo encontremos a los jugadores con más talento individual y con más nombre. También es importante ver a jugadores de un perfil diferente. Esperemos que cada uno entienda su papel», dijo Naggelsmann tras las primeras apariciones del jugador del Leverkusen.
Andrich, mientras, tras el éxito ante Francia y los Países Bajos, en el que se erigió como un hombre clave para ayudar en defensa y frenar a jugadores dificilísimos como Kylian Mbappé, demostró sentirse muy seguro con sus declaraciones posteriores a los dos partidos: «He aportado. Espero que me llamen para estar en la Eurocopa. Creo, sin duda, he rendido para estar allí. Los dos partidos contra Francia y Países Bajos fueron muy, muy buenos, en mi opinión».
Y, efectivamente, Naggelsmann incluyó a Andrich en la lista de la Eurocopa. Si no hay sorpresas, será titular ante Escocia en al partido inaugural del torneo, porque después de sus titularidades ante Francia y Países Bajos, repitió contra Ucrania (sin Kroos, por descanso tras ganar la Liga de Campeones) y Grecia. En el debut de Alemania, Kroos y Andrich disputarán su cuarto partido juntos.
Y es que, Andrich ha pasado de ser un buen suplente en el Leverkusen a ser un centrocampista clave en el equipo de Xabi Alonso y en la selección alemana. La lesión de Palacios, la aparición de Naggelsmann y el regreso de Kroos, llegaron en el momento justo. Los planetas se alinearon para un hombre que aporta el equilibrio que hace tiempo que perdió el combinado germano. Andrich es el guardaespaldas de Alemania.
Juan José Lahuerta