El centrocampista del Atlético de Madrid Rodrigo Riquelme no escondió este lunes que se llevaron «un golpe bastante duro» en el último partido de LaLiga EA Sports frente al Alavés, pero que tienen que pensar en el próximo partido ante el Athletic Club porque es «fundamental» para conseguir la clasificación para la Liga de Campeones.
«Nos hemos llevado un golpe bastante duro contra el Alavés, pero tenemos que estar pensando en el siguiente partido, que es fundamental para poder quedar en esos cuatro primeros puestos, que es el objetivo del club, y que en casa con nuestra gente seguro que va bien», señaló Riquelme tras participar junto a su compañero Stefan Savic en un evento de ‘Honor’, en el que la compañía asiática presentó sus nuevos modelos de móviles de la serie ‘Magic’.
Tras la dura derrota por 2-0 ante el Alavés en la última jornada, los colchoneros tienen claro que el objetivo es centrarse en el próximo duelo en el Metropolitano ante el Athletic Club, «un rival directo por la cuarta plaza», según lo definió Savic.
El montenegrino declaró que este encuentro lo afrontan «con mucha ilusión» y que están convencidos de que «con la afición» van a hacer «un gran partido». Además, incidió en que el objetivo es «quedar entre los cuatro primeros para jugar la Liga de Campeones la próxima temporada».
Por otro lado, el central confesó que hace dos años tuvo un año muy complicado con las lesiones, que le afectaron mucho, y que se dedicó a trabajar mucho más para superarlo. «Cambié la dieta, intenté superarme y logré pasar ese momento duro. Te duele no poder ayudar a tus compañeros porque entras de una lesión a otra y es muy duro para un jugador, pero en ese momento tuve la cabeza dura de trabajar más fuerte y dedicarme a tope», expresó.
«Todos opinan sobre cada error, cada gol, cada lesión y tú intentas no escuchar, pero al final lo haces. Somos humanos y eso te afecta, a veces te deprime, y otras, la gente te da un subidón, pero hay que estar mentalmente fuerte y tener el objetivo», manifestó sobre las críticas recibidas en estos periodos duros.
Riquelme, por su parte, también reconoció que hace unos años tuvo un bajón anímico y quiso dejar de jugar al fútbol, pero que gracias a su familia y a lo que le gusta jugar logró superarlo. «Al hacer la pretemporada con el primer equipo recuperé esa energía del fútbol y volví a divertirme», contó.
«Ahora estoy bien gracias a mi familia y al vestuario que me conocen desde que era pequeñito y me tratan muy bien», explicó el canterano, que destacó el «carácter y personalidad» de Savic. «Desde que le conocí le admiro, te dice las cosas tal y como las piensa, y para la gente que estamos entrando en el equipo, nos viene espectacular», afirmó.
Sobre sus opciones de poder jugar la próxima Eurocopa, el extremo no ocultó que le gustaría y que se ve «con posibilidades», aunque dejó claro que, si no va, animará a la selección desde casa. «Es un gran futbolista que tiene una proyección impresionante y merece estar. Seguro que va a trabajar hasta el último día, no se va a rendir nunca», replicó por su parte Savic.