El expresidente de la Generalitat y candidato de Junts a las elecciones catalanas, Carles Puigdemont, durante un acto de Junts+, a 6 de abril de 2024, en Elna (Francia). (Glòria Sánchez/Europa Press) (Glòria Sánchez – Europa Press/)
El futuro de Carles Puigdemont está actualmente abierto a muchas incógnitas. El expresident y actual candidato de Junts+ Puigdemont per Catalunya a las elecciones al Parlament tiene previsto volver a España el día de la investidura, independientemente de que sea nombrado presidente o no. De no serlo, Puigdemont ha asegurado que se retirará de “la política activa”. Hasta llegar a la cita y conocer quién sucederá a Pere Aragonès, todavía tienen que resolverse varios puntos.
El expresident catalán abandonó España a finales de octubre de 2017, tras ser despojado de su puesto en la aplicación del artículo 155 de la Constitución. Puigdemont lleva desde entonces huido de la Justicia española. Hasta el momento ha residido en Bélgica, aunque recientemente se ha mudado al sur de Francia para iniciar su campaña electoral. Pese a esto, el Gobierno aseguró ayer que este movimiento es “un tiro en el pie”, ya que Puigdemont no considera tampoco permanecer en la oposición.
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Los últimos movimientos del fugado, así como lo que pueda pasar, también dependen de la ley de amnistía, que supondrá el perdón para los independentistas catalanes que se vieron involucrados en el ‘procés’.
La fecha en la que entre en vigor la ley de amnistía
En estos momentos, la norma se encuentra paralizada en el Senado, después de que esta fuera aprobada por el Congreso el pasado 14 de marzo. Allí, tiene como plazo máximo dos meses para su tramitación, según establece la Constitución. Por lo tanto, tras pasar este trámite, volverá al Congreso previsiblemente a mediados de mayo. Cuando se publique en el Boletín Oficial del Estado (BOE) ya estará en vigor. Esto podría ocurrir en pleno periodo electoral, entre las elecciones catalanas del 12 de mayo y las europeas el 9 de junio.
Ya en el pasado mes de marzo, su abogado, Gonzalo Boye, expresó en una entrevista en RAC1 que el expresident estaba dispuesto a regresar a España aun sin que la amnistía estuviese activa, y que lo haría sin miedo a ser detenido una vez Puigdemont pisara España. “Lo que no podrán impedir es que sea presidente de la Generalitat”, proclamó el letrado.
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Ahora, ya se conoce que Puigdemont volverá el día de la sesión de investidura, y si la ley de amnistía se aprueba según lo previsto, para entonces ya se habrían celebrado las elecciones catalanas a las que el líder de Junts se presenta como candidato. Pero de no ser investido como presidente, pese a que regresaría igualmente a Cataluña después de siete años, ya ha asegurado que abandonará la política activa.
Puigdemont y la protección de aforado de la Eurocámara
Actualmente, Puigdemont es eurodiputado en el Parlamento de Estrasburgo hasta que renuncie al acta con la celebración de las elecciones europeas del próximo 9 de junio. Hasta su anuncio como candidato a las elecciones autonómicas, Puigdemont era candidato para estos comicios. El político llevaba como diputado desde julio de 2019, lo que le daba inmunidad y que, hasta ahora, le ha servido para frenar la orden europea de detención lanzada por el Tribunal Supremo.
De hecho, el pasado mes de junio el Tribunal General de la Unión Europea (TGUE) dictó la decisión del Parlamento Europeo de levantarle la inmunidad al expresident. De hecho, este lunes 8 de abril se ha conocido que la jueza del Tribunal Supremo Susana Polo ha citado a Puigdemont y al diputado autonómico Rubén Wagensberg a declarar por videoconferencia como investigados por el caso Tsunami Democràtic entre el 17 y 21 de junio, poco más de un mes después de la celebración de los comicios catalanes.
No obstante, la pérdida de inmunidad tiene matices. De aprobarse la ley de amnistía antes de la investidura, se impediría su arresto. Sin embargo, la designación del nuevo presidente de la Generalitat puede alargarse hasta la última semana de junio, ya que la constitución de la Cámara tiene que ser como máximo el 10 de junio. A partir de esta fecha se disponen de 10 días hábiles para investir al nuevo jefe del Govern.
