Bogotá, 3 abr (EFE).- El presidente colombiano, Gustavo Petro, afirmó este miércoles que con el hundimiento en el Senado de su controvertido proyecto de reforma a la salud, las empresas prestadoras de ese servicio quebrarán y hará «de golpe» la transición hacia un nuevo modelo.
Petro se refirió a su peor derrota legislativa en un discurso que dio esta noche en la Gran Asamblea Nacional Cafetera, realizada en Bogotá, donde insistió que el Congreso rechazó la «concertación» que, según dijo, planteó el Gobierno para salvar de la quiebra a las entidades prestadoras de salud (EPS).
«Lo que nos está diciendo el mismo Congreso es que se quiebran las EPS, ahora nos toca resolverlo; lo que podía ser una concertación tranquila, ordenada, sin problemas, hacer la transición, ahora es de golpe», manifestó el presidente.
El hundimiento de la reforma coincidió con la orden del Gobierno de intervenir las dos mayores EPS del país, Sanitas y Nueva EPS, que juntas tienen 16,7 millones de afiliados, argumentando malos manejos en un contexto de crisis financiera del sector.
Según Petro, el proyecto original de reforma a la salud, presentado hace 14 meses, no contemplaba las EPS, «se acababan», dijo, pero por presiones de congresistas el Gobierno aceptó «una concertación» para garantizar su continuidad pero ya no como «aseguradoras» de salud sino como «gestoras».
«El Gobierno permite que las EPS sigan, las salvamos», afirmó el mandatario, quien añadió que a pesar de ese cambio a la reforma, el Congreso no estuvo de acuerdo con el proyecto y lo hundió hoy en la Comisión Séptima del Senado donde fue aprobada por nueve votos contra cinco una propuesta para archivarla.
Ante los cafeteros, Petro subrayó que a «los congresistas de las EPS», de los que dijo que fueron financiados por empresas del sector, «no les gustó» el texto de la reforma.
El mandatario agregó que, al hundir el proyecto, «las EPS quebraron» y por eso el cambio pretendido en el sistema de la salud tendrá que hacerlo «de golpe» porque, enfatizó, «lo que tenemos entre manos son vidas humanas, esto no son granos de café, que es importante, pero es más importante que son vidas humanas».
Los comentarios del presidente despertaron el temor a que recurra a una maniobra fuera de la institucionalidad pues la intervención en Sanitas y en la Nueva EPS es interpretada por algunos expertos como un intento de aplicar por decreto lo que no pudo con el intento de reforma de la salud.
«Si Gustavo Petro y sus ministros pretenden imponer a la fuerza una reforma archivada por el Legislativo, entran de lleno en el campo del código penal, violan la Constitución y la Convención Americana de Derechos Humanos. El abuso de poder y el rompimiento de la separación de poderes son la antesala de las dictaduras», manifestó el expresidente conservador Andrés Pastrana (1998-2002).
Por su parte, el exministro de Hacienda Mauricio Cárdenas, señaló: «Quedamos en manos del Consejo de Estado, que debe revisar la legalidad de los actos administrativos con los que se está estatizando la salud». E