El Gobierno de Panamá ha anunciado este lunes que ha llamado a consultas a su embajador en Nicaragua en protesta por la protección dada en su legación diplomática en Ciudad de Panamá al expresidente Ricardo Martinelli (2009-2014), condenado por blanqueo de capitales y acusado de sobornos.
El Ministerio de Exteriores panameño ha criticado que Managua haya permitido, «al amparo de una supuesta protección que es ilegal de conformidad con el Derecho Internacional», que Martinelli mantenga y despliegue «acciones desde su sede diplomática en Panamá, con fines político-partidistas».
«Panamá se siente verdaderamente afectada en su integridad territorial por la actitud permisiva de la República de Nicaragua que viola flagrantemente y de manera reiterada normas fundamentales del Derecho Internacional», reza un comunicado. La cartera de la diplomacia panameña ha aprovechado la ocasión para exigir a Managua «el cumplimiento de sus obligaciones internacionales».
Martinelli se encuentra en la Embajada de Nicaragua a la espera de un salvoconducto de las autoridades panameñas para salir del país. El expresidente, que se presentaba como candidato presidencial para las próximas elecciones pero ha sido inhabilitado, denunció que el actual mandatario, Laurentino ‘Nito’ Cortizo, planea matarlo antes de los comicios del 5 de mayo próximo.
El que fuera mandatario de Panamá entre 2009 y 2014 fue condenado a diez años y ocho meses de prisión por blanqueo de capitales a través de la compra de un grupo de medios de comunicación en el caso ‘Business News’. También fue condenado a pagar una multa de 19,2 millones de dólares (17 millones de euros) y vio frustradas sus aspiraciones de volver a gobernar el país al ser inhabilitado en virtud de la Constitución.