En la mañana del sábado 6 de abril se reportaron fuertes enfrentamientos armados ocurridos en las zonas rurales de El Descanso, Los Robles y La Trinidad pertenecientes al municipio de Garzón, entre tropas de la Novena Brigada del Ejército Nacional y supuestos integrantes de la estructura Rodrigo Cadete del Estado Mayor Central de las Farc activos en esta área del departamento de Huila.
Además, se conoció que durante los combates dos soldados fallecieron y uno más resultó herido, este último recibe cuidados médicos en una institución sanitaria local, sin embargo, se desconoce con exactitud su estado de salud. La confrontación inició en las primeras horas del sábado, con intercambios de fuego entre las Fuerzas militares y el grupo armado ilegal.
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La confrontación en las zonas rurales de Garzón desencadena un despliegue adicional del ejército para restablecer la paz, mientras un herido lucha por su vida en el hospital – crédito Ejército Nacional
Los soldados profesionales que resultaron muertos tras los enfrentamientos, fueron identificados como Cristian Camilo Flórez Soto, de 23 años, y Yeiner José Bonivento Epiayú, de 21 años, pertenecientes al batallón de infantería número 26 Cacique Pigoanza. Edgar Martín Lara, Secretario de Gobierno del departamento huilense, expresó que estos incidentes de seguridad se registraron específicamente en el entorno rural del municipio de Garzón, dejando en evidencia la gravedad de los sucesos para la tranquilidad regional: “hubo intercambio de disparos entre la fuerza pública y una estructura armada ilegal, estos son los hechos de orden público que se nos han registrado en el día de hoy en el Huila”.
La institución castrense rechazó el asesinato de los dos militares que cumplían tareas de estabilidad y seguridad para los habitantes de la región – crédito @COL_EJERCITO / X
En respuesta al ataque, unidades adicionales del Ejército se movilizaron hacia la zona de los enfrentamientos con el objetivo de apoyar a los efectivos que se encontraban bajo fuego de los presuntos disidentes que vienen intimidando y extorsionando a ganaderos, comerciantes y campesinos en esta región. Adicionalmente, en la vereda Campo Bello, del mismo municipio, se mantienen los combates.
La reciente escalada de violencia evidencia la continua amenaza que representan las estructuras armadas insurgentes para los habitantes de Huila, poniendo a prueba su resiliencia – crédito Colprensa
Un policía muerto a manos de las Farc en Cauca
Sobre la tarde del viernes 5 de abril, un ataque contra una patrulla de la Policía de Tránsito en la vía Panamericana, específicamente entre Tunia y Piendamó, Cauca, dejó un uniformado muerto y cinco más heridos, además de afectar a tres civiles. El incidente, que igualmente apunta a ser obra de un grupo armado vinculado con las disidencias de las Farc, generó una situación de inestabilidad en el orden público en la región.
El enfrentamiento se produjo tras una emboscada a los agentes, resultando en enfrentamientos que, según reportes, pusieron a civiles en medio del fuego cruzado. Varias unidades policiales acudieron al lugar en respaldo, mientras que los heridos fueron atendidos en el centro asistencial de Piendamó y otros trasladados a Popayán para recibir atención médica. El patrullero Emerson Andrés Serrano Sánchez, gravemente herido durante el incidente, murió debido a la magnitud de sus lesiones. Asimismo, el Hospital de Piendamó experimentó hostilidades luego del ataque, manteniendo a las autoridades en una constante alerta.
El general William René Salamanca, director de la Policía Nacional, condenó el ataque y prometió esfuerzos coordinados con las Fuerzas Militares para llevar a los responsables ante la justicia. Estos atentados se suman a una serie de acciones violentas contra la fuerza pública reportadas en poco más de 24 horas en distintas regiones del país. Los recientes ataques incluyen la explosión de artefactos cerca de la Tercera Brigada del Ejército en Cali, el lanzamiento de una granada en Tumaco, Nariño, y agresiones contra una estación de policía en Robles, Jamundí. Por lo anterior, el comandante de las FF. MM. general Helder Bonilla, ordenó un despliegue intensivo de unidades militares con el fin de contrarrestar la creciente ola de violencia que sigue al fin del cese al fuego bilateral con las disidencias.
