Alcorcón (Madrid), 1 jun (EFE).- Mehdi Nafti, entrenador franco-tunecino del Alcorcón, declaró este sábado que, pese a que los tres puntos no sirven de nada, el partido contra el Burgos «no va a ser un amistoso, ni mucho menos, porque hay mucho en juego por el club y la imagen» que deben dar.
El Alcorcón, descendido la pasada jornada, afronta un partido intrascendente contra el Burgos para despedir la temporada.
«Hay mucho en juego a nivel individual. Hay un club al que representar y una imagen que dar, además del objetivo de seguir invicto en casa. No es lo mismo terminar una temporada con victoria que sin ella», dijo Nafti, en conferencia de prensa.
«Para nosotros no va a ser un amistoso, ni mucho menos. Hay que ganar por nuestra gente. Tenemos que acabar dando una buena imagen por la gente que nos apoya y llora por nosotros. Es una obligación darles una alegría aunque no valga», manifestó.
«Además debemos gestionar situaciones personales a nivel contractual. Por eso ha sido importante hablar con los jugadores. Yo no estaría en condiciones de competir y hay que ser honesto. Hay una obligación del que salga el domingo mantener la intensidad y el nivel competitivo. Somos profesionales», confesó.
El técnico franco-tunecino reconoció que el descenso ha sido «un palo duro». «Pensaba, y tenemos datos, que nos han hecho pensar que teníamos opciones de conseguir el objetivo. Lo que más rabia te da es que siempre has estado cerca. Solamente hubo una racha de dos derrotas seguidas».
Sobre su futuro, una vez que acabe contrato el 30 de junio, Nafti no quiso hablar.
«La relación con Andrés Fernández (director deportivo) es top y va más allá, va a nivel familiar, pero hay cosas que se han hecho bien durante el año y otras bastante mal», concluyó. EFE
drl/jag
