Al menos 50 personas han muerto en un nuevo ataque perpetrado por personas armadas no identificadas contra la localidad nigeriana de Yargoye, situada en el estado de Katsina (norte), un incidente que se ha saldado además con el secuestro de un número indeterminado de personas, en medio del aumento de la inseguridad en esta zona del país durante los últimos años.
Fuentes oficiales citadas por el diario nigeriano ‘The Guardian’ han indicado que al menos 50 personas han muerto en el asalto, incluido un número indeterminado de niños, si bien otras fuentes han elevado a 65 el número de fallecidos, dado que durante las últimas horas se han hallado más cadáveres en la zona.
Estas fuentes han señalado además que decenas de personas han sido secuestradas por los atacantes, que habrían trasladado a los rehenes hacia una zona boscosa de los alrededores, sin que las autoridades del país africano se hayan pronunciado por ahora sobre lo sucedido.
La inseguridad en Nigeria, anteriormente centrada en el noreste del país –donde operan Boko Haram y su escisión, Estado Islámico en África Occidental (ISWA)–, se ha extendido en los últimos años a otras zonas del norte y el noroeste, haciendo saltar las alarmas por la posible expansión de estas redes terroristas y criminales.