Mar Flores ha cumplido este 11 de junio 55 espectaculares años. Y, a pesar los rumores de que podría estar de nuevo enamorada después de sus imágenes en actitud cómplice con un atractivo hombre en Ibiza tras su ruptura definitiva a principios de 2024 con el empresario mexicano Elías Sacal -tras varios años de idas y venidas repleto de crisis y reconciliaciones-, en esta ocasión ha preferido celebrar su cumpleaños en la intimidad, rodeada tan solo de su familia.
A pesar de ser una fecha muy especial, la modelo ha continuado con sus rutinas diarias y no ha dudado en mostrar su faceta de madraza recogiendo a sus hijos pequeños del colegio, los mellizos Bruno y Darío, de 13 años, como si de una jornada normal se tratase.
Apostando por la comodidad, Mar ha lucido pantalones vaqueros ceñidos, sudadera rockera de escote caído dejando uno de sus hombros a la vista, y sandalias planas. Un sencillo look casual con el que ha presumido de su espectacular figura a sus 55 años, demostrando que está mejor físicamente que nunca.
Sin embargo, ha llamado la atención su rostro serio y preocupado durante su paseo de regreso a casa con sus hijos, en el que no le vimos esbozar ni una sola sonrisa pese a tratarse de su cumpleaños. Un día especial en el que recibió diversos regalos y ramos de flores, y también la visita de su exmarido Javier Merino, con el que tiene una maravillosa relación desde su separación en 2016 y que no dudó en acercarse hasta el domicilio familiar para desearle un feliz cumpleaños.
A quien no hemos visto en esta fecha marcada en rojo en el calendario para Mar es a su hijo mayor, Carlo Costanzia, en el punto de mira por su noviazgo con Alejandra Rubio. A pesar de que tanto la modelo como el actor han asegurado que su relación es buena, el protagonista de ‘Toy Boy’ no ha asistido al cumpleaños de su madre.