Los rebeldes hutíes de Yemen han asegurado este lunes que han desmantelado una importante red de espionaje liderada por Estados Unidos e Israel que operaba desde 2015 para recopilar información militar y de seguridad con el objetivo de debilitar a sus fuerzas.
Esta red de espionaje israelí-estadounidense se habría infiltrado en varios sectores del país, incluyendo la política o la economía, y habría proporcionado información sensible tanto a la Agencia Central de Inteligencia estadounidense, la CIA, como al servicio de Inteligencia exterior de Israel, el Mossad.
Los hutíes también han afirmado que la red habría funcionado al amparo de organizaciones internacionales, camuflada con labores de trabajo humanitario, para «encubrir su espionaje y actividades de sabotaje», según ha recogido la agencia de noticias SABA.
Estados Unidos cerró en 2015 su Embajada en Yemen después de que las fuerzas hutíes se hicieran con el control de parte del país y forzaran la dimisión del entonces presidente Abdo Rabbu Mansur Hadi y de su Gobierno. Los rebeldes establecieron ese año unas autoridades paralelas tras la toma de la capital, Saná.
Los hutíes respaldados por Irán, que controlan las zonas más pobladas de Yemen, han lanzado ataques contra Israel y contra buques a los que achacan algún tipo de relación con este país en represalia por la ofensiva israelí desatada contra la Franja de Gaza tras los ataques del pasado 7 de octubre por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás).