El partido de los Conservadores y Reformistas Europeos (ECR), al que está adherido Vox, pide descentralizar la toma de decisiones de los Veintisiete, se compromete a invertir más en defensa y quiere blindar las fronteras terrestres, marítimas y aéreas de cara a la próxima legislatura europea.
Así lo ha hecho en un manifiesto presentado este sábado en el marco del evento de Vox Europa Viva 24 de cara a las elecciones del 9 de junio, donde recogen sus principales prioridades para la próxima legislatura.
En primer lugar, el ECR alude a la preservación de la identidad de las naciones y aluden a una reforma de la UE para salvaguardar la soberanía de los Estados miembros. «Creemos que la UE debería hacer menos, pero mejor», señalan. Así, hacen patente su rechazo a «cualquier centralización innecesaria del poder en Bruselas» porque «las decisiones deben tomarse lo más cercanamente posible a la gente».
«Nos oponemos a cualquier intento de centralizar aún más la UE y a la extensión de la votación por mayoría cualificada en áreas de las que actualmente está excluida», señalan, censurando que el papel de la Comisión Europea «no debe ser equivocado con el de un gobierno de un superestado europeo». En cambio, abogan por potenciar la soberanía de los Estados miembros «aprovechando los principios de subsidiariedad y proporcionalidad, requisitos del Tratado de la UE».
Por otro lado, el ECR quiere fortalecer la industria de defensa europea, interactuando directamente con las Fuerzas Armadas y aprovechando los recursos de la UE, aunque se muestran «sumamente escépticos» respecto de la creación de una unión de defensa a nivel de la UE.
Recalcando su compromiso para intensificar la cooperación UE-OTAN, piden aumentar los presupuestos de defensa, la tecnología y la instrucción de las fuerzas con la vista puesta en «proteger a los ciudadanos y combatir el terrorismo transfronterizo».
SÓLO REFUGIADOS «GENUINOS»
Sobre la migración, el grupo parlamentario pide una estrategia migratoria «integral» para asegurar las fronteras europeas que incluya el refuerzo de Frontex y Europol. Creen que la UE debe ayudar a los Estados miembros a ordenar los flujos migratorios y «no forzar a sus ciudadanos a dar la bienvenida a inmigrantes ilegales sin su consentimiento». Para ello, proponen asegurar las fronteras cubriendo «todos los posibles puntos de entrada, incluidas las fronteras aéreas, terrestres y marítimas».
«Aumentaremos las repatriaciones, estableceremos plataformas regionales y colaboraremos con terceros países en la externalización de la gestión migratoria», informan. El objetivo, explican, es garantizar que la mayoría de las solicitudes de protección internacional se evalúen directamente fuera de la UE. Asimismo, quieren «bloquear las salidas ilegales a través de misiones navales combinadas».
Además, pretenden «evitar el abuso del sistema de asilo», por lo que abogan por conceder asilo «sólo a refugiados genuinos». «Con fronteras exteriores fuertes, podemos garantizar mejor la seguridad personal y comunitaria de nuestros propios ciudadanos», resumen.
El texto también se ocupa de otras cuestiones, como la defensa de la agricultura y la pesca sostenibles o una revisión del Pacto Verde europeo, al que el ECR se opone frontalmente.