Madrid, 28 abr (EFECOM).- Los analistas se pronuncian con mayor cautela sobre cuándo llegarán los eventuales recortes de tipos de la Reserva Federal (Fed) ante la dificultad de controlar la inflación sin lastrar el crecimiento y esperan un discurso duro en la reunión de la Fed de esta semana.
La economía de EE.UU. ha hecho cambiar el paso de los analistas, que a comienzos de año anticipaban varias bajadas continuadas de tipos a ambos lados del Atlántico y ahora ven una divergencia entre Europa y EE.UU., e incluso algunos dudan de si llegarán los recortes.
Los expertos creen que el discurso de Jerome Powell, presidente de la Fed, se endurecerá en la reunión que se celebrará esta semana.
«Esperamos que la declaración de la reunión y la conferencia de prensa del presidente Powell indiquen un umbral más alto para los recortes de tipos y menos certeza de que la flexibilización será apropiada este año», apuntan los analistas del gigante financiero Nomura.
Estos expertos anticipan que se mantendrá el discurso duro en la reunión del FOMC (Comité de Operaciones de Mercado Abierto) de mayo por el resurgimiento de la inflación y mantienen sus previsiones de dos recortes este año, en julio y septiembre, aunque admiten que los riesgos existentes pueden derivar en menores recortes.
Por su parte, los analistas de la gestora Abrdn estiman que los recortes en EE.UU. no llegarán hasta septiembre.
«Nuestro escenario central prevé que la Reserva Federal de EE.UU. aplicará dos recortes de tipos este año, en septiembre y diciembre, dado que es probable que el crecimiento y la inflación se moderen ligeramente en la segunda mitad del año», apuntan.
Gestoras y banca privada han reducido la senda de bajadas que esperan para este ejercicio, frente a las previsiones de comienzo de año.
«Los mercados están a punto de descartar cualquier recorte de los tipos de interés para 2024, pero parece un poco exagerado. En Europa y el Reino Unido, es probable que la inflación siga disminuyendo», apunta Chris Iggo, responsable de la gestión de la cartera de valores core en la gestora de fondos AXA Investment Managers.
Este experto señala que los mercados han rebajado las expectativas sobre lo que harán los bancos centrales este ejercicio y apunta que en el caso de EE.UU. han pasado de esperar seis recortes a valorar ahora menos de dos; mientras que en la eurozona, el mercado estima tres.
Por su parte, George Brown, economista senior de EE.UU. de la gestora Schroeders, apunta que Powell podría sentar las bases de una política de flexibilización en su discurso de apertura del simposio económico de Jackson Hole en agosto.
«Un recorte de tipos en septiembre tendría, además, la ventaja añadida de ir acompañado de un ‘gráfico de puntos’ actualizado, que el FOMC podría utilizar para comunicar sus expectativas sobre el calendario y el alcance de cualquier flexibilización», añade.
En sus previsiones consideran que a este recorte de septiembre, le seguirían dos recortes más en diciembre y marzo.
El jueves pasado se conoció el dato preliminar del PIB de EE.UU., que creció un 1,6 % en el primer trimestre del año, cifra por debajo del incremento del 2,2 % que pronosticaban los analistas.
Además, el viernes se publicó el Deflactor del Consumo Personal (PCE) que se aceleró por segundo mes consecutivo y rompió la tendencia de moderación mostrada hasta junio; mientras que la tasa subyacente (la que no tiene en cuenta los productos más volátiles) se mantuvo estable frente a la previsión del mercado que esperaba un descenso.
El escenario de inflación elevada, lo que ha venido a denominarse «inflación pegajosa», junto con un debilitamiento de la economía complica el papel de la Fed, según los expertos.
«El repunte de las tensiones inflacionistas (mantenimiento en el subyacente), junto a un gasto en términos reales elevado, resta aún más presión a la Fed para iniciar el proceso de recorte de tipos. El mercado ya ha ido trasladando las expectativas hacia una bajada a finales de año vs tres esperadas a comienzos de año», señalan los analistas de Bankinter. EFECOM
mga/prb