La Policía de Suecia ha confirmado que hay ya varias peticiones para convocar manifestaciones durante la próxima semana en Malmo coincidiendo con el festival de Eurovisión, relativas en su mayoría a la escalada de violencia en Oriente Próximo, lo que ha llevado a varios países a pedir a sus ciudadanos que extremen las precauciones.
Malmo espera recibir a unos 100.000 visitantes estos días y tiene ya convocadas movilizaciones de diversa índole y que, según los organizadores y la Policía, podrían reunir a unas 40.000 personas, informa la radiotelevisión pública SVT. La Policía ha confirmado en su página web que trabaja para que todo se desarrolle con normalidad.
Así, se compromete a velar por el respeto de la libertad de expresión y reunión, por lo que expone que todo aquel que quiera participar en las manifestaciones podrá hacerlo. «Si se cometen delitos en relación con estos acontecimientos, la Policía los investigará», ha advertido el cuerpo.
La «mayoría» de las concentraciones autorizadas «están relacionadas con la guerra entre Israel y Hamás». La presencia de Israel entre los países participantes en este festival musical ha generado polémica en los últimos meses, ya que algunos colectivos pedían su veto como represalia por la ofensiva militar sobre la Franja de Gaza.
De hecho, el Consejo de Seguridad Nacional de Israel ha pedido a los ciudadanos israelíes que «reconsideren» su posible desplazamiento a Malmo tras elevar su nivel de alerta para esta ciudad concreta –hasta el nivel tres, una «amenaza moderada»–.
Además de las protestas en sí, al Gobierno israelí le preocupa la actividad yihadista. Teme «que los terroristas aprovechen las manifestaciones y la atmósfera contra Israel para perpetrar ataques contra los israelíes que lleguen a Eurovisión».
También otros países participantes en el certamen han actualizado en los últimos días sus recomendaciones de viaje, entre ellas Reino Unido, que ve «probable» un aumento de las protestas y anticipa posibles «choques» si hay concentraciones de ideologías contrarias al mismo tiempo.
Por su parte, el Ministerio de Exteriores italiano ha pedido «especial cautela», así como permanecer atento y «seguir las instrucciones de seguridad» que puedan ir brindando las autoridades de Suecia.
QUEMA DE UN CORÁN EN MALMO
Este mismo viernes una mujer vestida de negro, acompañada de otro hombre que llevaba puesto un chaleco antibalas y que vestía la bandera israelí, ha quemado un Corán en un parque del centro de Malmo mientras sostenía un crucifijo blanco frente a un grupo de manifestantes propalestinos, según ha recogido ‘Aftonbladet’.
El embajador de Israel en Suecia, Ziv Nevo Kulman, ha tildado el acto de «cobarde» en la red social X y lo ha condenado «en los términos más enérgicos», ya que Malmo «debería estar unida por la música» de cara a la próxima semana.
«Quemar el libro sagrado del Corán mientras se ondea la bandera israelí es una repugnante falta de respeto, no sólo hacia el 20 por ciento de los ciudadanos israelíes de fe musulmana sino porque también está en contra de los valores de tolerancia y respeto mutuo», ha señalado en la citada red social.
