Bangkok, 13 jun (EFE).- El futbolista malasio Faisal Halim, quien sufrió a principios de mayo un ataque con ácido que le provocó quemaduras de cuarto grado, afirmó este jueves que espera volver al terreno de juego en unos meses.
«Mi esperanza es volver al campo en los próximos uno o dos meses, aunque el médico dice que podría tardar hasta seis (…) Estoy dispuesto a volver a entrenar cuando los médicos me den luz verde», afirmó el delantero del Selangor FC durante su primera aparición ante los medios desde el incidente, ocurrido el 5 de mayo.
El asalto, por el que no hay detenidos y del cual se desconocen los motivos, se produjo cuando el deportista, de 26 años e internacional con su país, se encontraba en un centro comercial a las afueras de Kuala Lumpur.
A raíz del ataque, el futbolista fue ingresado durante tres semanas en un hospital de la capital malasia donde fue tratado y operado por quemaduras en el rostro, cuello, hombros, manos y pecho, que le han dejado cicatrices visibles.
«Al principio pensé en volver a mi ciudad natal y dejar atrás el fútbol (…) Pero el equipo me aseguró que cuidarían de mi familia, lo que me hizo decidir por recuperarme y volver a la césped», dijo Faisal durante una emotiva rueda de prensa retransmitida en las redes sociales del club.
El futbolista confesó que una de las peores consecuencias del ataque fue la dificultad que experimentó para recuperar confianza en sí mismo hasta volver a abrazar a su hijo.
«Soy muy cercano a mi hijo. Después de lo que sucedió, pasé más de un mes sin poder abrazarle (…) Fue sólo hace unos cuatro o cinco días cuando finalmente pude abrazarlo», admitió entre lágrimas el malasio, afectado por las marcas que el asalto dejó en su lado derecho de la cara y sus brazos.
Desde que salió del hospital, el jugador y su familia fueron trasladados a un lugar de seguridad y van acompañados por guardaespaldas.
La Policía de Malasia, que aún investiga el ataque, detuvo en un primer momento a dos sospechosos, pero ambos quedaron en libertad sin cargos al no encontrar vínculos con el ataque.
«Echo de menos el fútbol», subrayó el futbolista.