El emir de Kuwait, Mishal al Ahmed al Sabá, ha anunciado este domingo la formación de un nuevo gobierno encabezado por el hasta ahora primer ministro Ahmad Abdulá al Ahmad al Sabá, todo ello en medio de la crisis política entre el poder ejecutivo y el legislativo que le llevó esta semana a disolver el Parlamento.
Al Sabá ha emitido un decreto real, recogido por la agencia de noticias estatal KUNA, en el que se incluye el nombramiento de trece ministros, si bien al menos tres de ellos, (el titular de Petróleo, el de Finanzas y el de Exteriores), han conservado sus cargos.
En el segundo artículo del texto, el emir señala que el jefe de Gobierno y los ministros «deberán implementar este decreto, el cual entrará en vigor a partir de la fecha de su expedición y será publicado en el boletín oficial».
Este anuncio ha tenido lugar apenas dos días después de que el emir ordenara disolver el Parlamento y suspender algunos artículos de la Constitución durante un periodo no superior a cuatro años, alegando «conductas y acciones contrarias a los principios constitucionales» que habían creado un «malestar político» en el país.
En este sentido, afirmó que quienes se han opuesto a nombramientos «por ignorancia o intencionadamente», teniendo en cuenta que «elegir al primer ministro y los ministros es un derecho puramente constitucional del jefe del Estado», y aseguró que «la corrupción se ha infiltrado en la mayoría de las instalaciones gubernamentales e incluso en las instituciones de seguridad».
El emir kuwaití encargó a mediados de abril la formación de un nuevo Ejecutivo a Ahmad Abdulá al Ahmad al Sabá para tratar de pasar página a las tensiones políticas de los últimos meses tras las elecciones del 4 de abril –las cuartas celebradas en el país desde diciembre de 2020–, si bien arrojaron una aritmética parlamentaria muy similar a la que existía antes.
El país atraviesa una crisis económica y política marcada por la parálisis debido a la dimisión de varios gabinetes por las continuas fricciones con el Parlamento, actualmente dominado por la oposición. Este enfrentamiento ha obstaculizado los esfuerzos del rico productor de petróleo del golfo Pérsico para reducir su enorme dependencia del crudo e impulsar reformas fiscales.
ENCUENTRO ENTRE EL EMIR Y GUTERRES
Durante esta misma jornada, el emir kuwaití se ha reunido con el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, con motivo de una visita al país, en el que el jefe de la ONU le ha agradecido su «rol constructivo y coherente en la promoción del diálogo en la región y su contribución a los esfuerzos humanitarios, incluso en relación con la situación en Gaza», según reza un comunicado.
Por su parte, Kuwait ha destacado que durante el encuentro han revisado «las distinguidas relaciones históricas» entre el país y el organismo internacional, así como sus diferentes agencias, abordando «formas de desarrollar la cooperación entre ellos y discutiendo esfuerzos para apoyar la paz y la seguridad internacionales, coordinando los esfuerzos dirigidos al desarrollo e iniciativas humanitarias».
«También han revisado los últimos acontecimientos en Gaza, la necesidad de intensificar los esfuerzos internacionales para alcanzar un alto el fuego inmediato y los últimos hechos en los ámbitos regional e internacional», ha informado la citada agencia de noticias.
Por último, el emir ha concedido a Guterres la Medalla de la Cinta de Kuwait, «en reconocimiento a sus distinguidos esfuerzos en el campo del trabajo político y los grandes servicios que ha prestado».
