El cineasta belga Joachim Lafosse ha sido acusado por más de una decena de colaboradoras de generar un «sistema de control» detrás de las cámaras y crear un «entorno tóxico y desestabilizador» en los rodajes.
Las acusaciones, que no están acompañadas por el momento de ninguna demanda, han sido recogidas por Europa Press de un artículo publicado por el medio ‘Libération’, donde se añade que esstas conductas podrían constituir «acoso moral o sexual».
Entre los testimonios se incluyen por ejemplo el de la editora de cine Sophie Vercruysse, de 46 años, quien ha colaborado con Lafosse en títulos como el de ‘Perder la razón’ y en otras cinco películas durante el periodo de 2004 y 2015. Vercruysse asegura que el trabajo con el cineasta en estos años le ha dejado «muchas cicatrices».
La actriz Virginia Effira, otro de los testimonios que trabajó con el director belga en ‘Continuar’, ha asegurado que Lafosse es «alguien que sólo tiene acceso a una realidad, la suya» y es una persona que «busca desestabilizar a los demás, generar conflicto, sentirse vivo y probablemente crear».
Lafosse ha contestado con un correo electrónico a ‘Libération’ en el que asegura no haber buscado «herir o humillar intencionadamente a nadie», si bien también ha admitido que en sus primeros rodajes pasó por periodos de «estres y angustia».