La secretaria del Tesoro de Estados Unidos, Janet Yellen, ha expresado su preocupación por el creciente impacto adverso sobre las empresas y el empleo en todo el mundo del impulso de Pekín a la producción china en las nuevas industrias ‘verdes’, ante lo que ha asegurado que Washington no descarta ninguna respuesta.
En una rueda de prensa en Pekín, Yellen ha informado de que ha transmitido su preocupación a los altos funcionarios chinos por los «crecientes efectos negativos» en Estados Unidos y el mundo de la postura de China y sus desequilibrios macroeconómicos, con un débil consumo de los hogares y sobreinversión empresarial, agravados por el apoyo gubernamental a gran escala en sectores industriales específicos.
«Estamos viendo un aumento de la inversión empresarial en una serie de sectores nuevos a los que se dirige la política industrial de la República Popular China. Eso incluye vehículos eléctricos, baterías de iones de litio y energía solar», ha lamentado Yellen, advirtiendo de que esto genera riesgos significativos para los trabajadores y las empresas en Estados Unidos y el resto del mundo.
En opinión de la secretaria del Tesoro de Estados Unidos, las medidas adoptadas por Pekín pueden alterar los precios mundiales, inundando el mercado de productos chinos «artificialmente baratos», lo que pone en duda la viabilidad de las empresas estadounidenses y extranjeras, tal y como sucedió hace más de una década con el acero chino.
«He dejado claro que el presidente Biden y yo no volveremos a aceptar esa realidad», ha asegurado.
En este sentido, en declaraciones a la cadena CNBC, Yellen ha evitado descartar cualquier posible medida en respuesta a las políticas chinas. «Necesitamos mantener todo sobre la mesa», ha señalado al ser preguntada sobre la posibilidad de que Washington imponga aranceles si China no ajusta su enfoque a los incentivos industriales.
«No estoy pensando tanto en las restricciones a las exportaciones, sino en algunos cambios en su política macroeconómica y en una reducción en el monto de los subsidios a las empresas, particularmente de los gobiernos locales», dijo Yellen.