El Gobierno de Estados Unidos ha considerado este lunes que el ataque del brazo armado del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás), las Brigadas Ezzeldín al Qassam, contra el paso fronterizo de Kerem Shalom, que conecta el sureste de la Franja de Gaza con territorio israelí, «fue un acto increíblemente cínico» al tratarse de una «pieza central» para la entrega de ayuda humanitaria en el enclave palestino.
«Cuando les ves atacar la puerta que sirve como punto de entrega de ayuda humanitaria a Gaza –como vimos con nuestros propios ojos–, esto realmente socava cualquier afirmación que realizan de que actúan en nombre del pueblo gazatí», ha declarado el portavoz del Departamento de Estado estadounidense, Matthew Miller, durante una rueda de prensa en la que criticó de nuevo que «Hamás afirme que representa los intereses del pueblo palestino», cuando «se esconden» y utilizan «escudos humanos».
El ataque de la milicia palestina perpetrado el domingo con un sistema de misiles de corto alcance dejó cuatro militares muertos y una decena de soldados heridos. Tras esto, las autoridades militares israelíes anunciaron el cierre del paso fronterizo de Kerem Shalom y realizaron una serie de bombardeos contra supuestos puntos desde donde se lanzaron los cohetes. Los proyectiles impactaron en una zona deshabitada ubicada cerca de unas instalaciones militares.
Tras conocer el fallecimiento de militares israelíes, el jefe del Pentágono trasladó a su homólogo israelí, Yoav Gallant, sus condolencias en una llamada en la que reafirmó su compromiso con el «regreso incondicional de todos los rehenes» al abordar las negociaciones en curso sobre rehenes. También destacó la necesidad de que cualquier posible operación militar israelí en Rafá incluya un plan creíble para evacuar a los civiles palestinos» y abogó por mantener el flujo de ayuda humanitaria.