El Comité de Investigación de Rusia ha informado este jueves de la detención de un ciudadano de nacionalidad francesa en Moscú acusado de recopilar durante varios años información sobre las actividades militares y tecnológicas rusas.
Las autoridades rusas han abierto una causa penal contra el detenido por no haberse registrado como un supuesto «agente extranjero», un delito recogido en el Código Penal, según un comunicado recogido por la agencia Interfax.
El Comité de Investigación ha incidido en que todo el material recopilado por el ciudadano galo podría ser utilizado «contra la seguridad del Estado» si cae en manos de otras «fuentes extranjeras».
El detenido habría visitado en repetidas ocasiones el territorio ruso, incluida la capital, para reunirse con ciudadanos de Rusia. «En un futuro será imputado y se adoptará una medida preventiva», ha remachado el Comité de Investigación.
Aunque el Comité de Investigación no añade más detalles sobre la identidad del detenido, fuentes cercanas al caso han informado a la agencia TASS que se trata de un hombre de algo menos de 50 años que colabora con el Centro para el Diálogo Humanitario, una organización con sede en Suiza.
Según estas fuentes, el ciudadano francés se encarga de cuestiones euroasiáticas desde las revueltas sociales del Euromaidán, ocurridas en Ucrania en 2014 y que culminaron con la salida del gobierno prorruso. Antes de esto se habría ocupado del conflicto en Chechenia.