Santa Cruz de Tenerife (España), 5 jun (EFE).- El Observatorio Austral Europeo (ESO) firmó un acuerdo con un consorcio internacional, en el que hay tres centros españoles, para el diseño y construcción de ANDES, que es un espectrógrafo que se instalará en el Telescopio Extremadamente Grande (ELT), en Chile, para buscar señales de vida en exoplanetas y las primeras estrellas.
También servirá para comprobar las variaciones de constantes fundamentales de la fÃsica y para medir la aceleración de la expansión del Universo, informó este miércoles el Instituto de AstrofÃsica de Canarias (IAC), que forma parte del consorcio internacional junto al Instituto de AstrofÃsica de AndalucÃa (IAA) y el Centro de AstrobiologÃa de Madrid (CSIC-INTA), los tres españoles.
El acuerdo fue firmado por el director general de ESO, Xavier Barcons, y por Roberto Ragazzoni, presidente del Instituto Nacional de AstrofÃsica de Italia, que lidera el consorcio ANDES (ArmazoNes high Dispersion Echelle Specttrograph).
Explica el IAC en un comunicado que ANDES, anteriormente conocido como HIRES, es un potente espectrógrafo, un instrumento que divide la luz en las longitudes de onda que la componen para poder determinar propiedades importantes de los objetos astronómicos, como su composición quÃmica.
El instrumento tendrá una precisión «sin precedentes» en los rangos visible y del infrarrojo cercano, y cuando funcione en combinación con el potente sistema de espejos del ELT, permitirá realizar investigaciones en múltiples áreas de la astronomÃa.
«ANDES es un instrumento con un enorme potencial para realizar descubrimientos cientÃficos revolucionarios, que pueden afectar profundamente a nuestra percepción del Universo», asegura Alessancro Marconi, investigador principal de ANDES en el INAF.
Céline Péroux, cientÃfica de proyecto de ESO que realiza el seguimiento de ANDES, añade que las áreas de investigación van «desde la posible detección de rastros de vida en otros mundos y la identificación de la primera generación de estrellas, hasta el estudio de las variaciones en las constantes fundamentales de la fÃsica».
ANDES llevará a cabo sondeos detallados de las atmósferas de exoplanetas similares a la Tierra, lo que permitirá a la comunidad cientÃfica realizar búsquedas exhaustivas de indicios de vida.
 También será capaz de analizar elementos quÃmicos en objetos lejanos del universo temprano, por lo que es probable que sea el primer instrumento capaz de detectar a las primeras estrellas.
 Además, los datos de ANDES se podrán utilizar para comprobar si las constantes fundamentales de la fÃsica varÃan con el tiempo y el espacio.
Sus «exhaustivas» observaciones también se utilizarán para medir directamente la aceleración de la expansión del Universo, uno de los misterios cósmicos más importantes.
“La contribución de España en ANDES confirma que la comunidad cientÃfica española está en la frontera del conocimiento, en particular, ante la búsqueda de señales de vida en exoplanetas como la Tierra y en la medida directa de la expansión acelerada del Universoâ€�, señala Jonay González,, investigador del IAC y representante español en el Consejo de ANDES.
MarÃa Rosa Zapatero Osorio del Centro de AstrobiologÃa, agrega que se están «encontrando planetas rocosos en zonas habitables alrededor de sus estrellas», pero solo estudiando sus atmósferas se podrá saber «si de verdad dan cobijo a una vida» como la que se conoce. «ANDES es vital para este cometidoâ€�.
“Tanto en sus objetivos cientÃficos como en su diseño tecnológico, ANDES se beneficiará de la experiencia adquirida por el IAA-CSIC en CARMENES, uno de los espectrógrafos detectores de exoplanetas de mayor éxito de los últimos añosâ€�, declara Pedro Amado, investigador del Instituto de AstrofÃsica de AndalucÃa y representante del CSIC en el comité de dirección del consorcio ANDES.
El ELT de ESO se está construyendo en el desierto de Atacama, en el norte de Chile, y cuando comience a funcionar a finales de esta década, el ELT será el mayor ojo del mundo en el cielo, «marcando una nueva era en la astronomÃa terrestre».
El proyecto ANDES lo desarrolla un consorcio internacional compuesto por institutos de investigación de 13 paÃses.